86% de los docentes afirma que
necesita mayor preparación para enfrentar la educación del siglo XXI
Un estudio de opinión del portal educativo www.educarchile.cl constató que la diversidad de los estudiantes es uno de los desafíos más importantes para los docentes.
La opinión de
los profesores es mayoritaria: existen nuevas realidades en sus salas de clases
que están desafiando su labor educativa y demandan nuevos apoyos. Así lo
refleja el estudio de opinión realizado por el portal www.educarchile.cl,
del Ministerio de Educación y Fundación Chile.
Un 86% de los docentes encuestados afirma que requiere mayor preparación para afrontar los desafíos de la Educación del siglo XXI. Esta percepción es compartida por profesores de aula y directivos de ambos sexos. En contrapartida, solo un 13% de los docentes declaró sentirse totalmente preparado para afrontar los desafíos de la educación de hoy.
“El sistema educativo sigue funcionando bajo lógicas heredadas desde el siglo XIX, con filas de bancos mirando hacia un pizarrón. Sin embargo, nuestros niños y jóvenes son nativos del siglo XXI, con otra forma de aprender y en el futuro deberán resolver problemas aún desconocidos. Es urgente que actuemos para que la Educación logre dar respuestas a las necesidades del mundo de hoy y mañana”, afirma Ana María Raad, gerente del Centro de Innovación en Educación de Fundación Chile.
Una educación para el siglo XXI busca entregar al futuro ciudadano herramientas para aprender, vivir y trabajar en un tiempo de intensos cambios sociales, económicos y tecnológicos. Cambios que en la voz de los usuarios de educarchile se reflejan en desafíos que deben asumir desde la sala de clases: “una educación integral e inclusiva, pensada para alumnos con distintas capacidades de aprendizajes”, “la abundancia de información requiere tiempo para seleccionar lo más adecuado y veraz”, son algunas de las transformaciones más citadas por el estudio.
Un 86% de los docentes encuestados afirma que requiere mayor preparación para afrontar los desafíos de la Educación del siglo XXI. Esta percepción es compartida por profesores de aula y directivos de ambos sexos. En contrapartida, solo un 13% de los docentes declaró sentirse totalmente preparado para afrontar los desafíos de la educación de hoy.
“El sistema educativo sigue funcionando bajo lógicas heredadas desde el siglo XIX, con filas de bancos mirando hacia un pizarrón. Sin embargo, nuestros niños y jóvenes son nativos del siglo XXI, con otra forma de aprender y en el futuro deberán resolver problemas aún desconocidos. Es urgente que actuemos para que la Educación logre dar respuestas a las necesidades del mundo de hoy y mañana”, afirma Ana María Raad, gerente del Centro de Innovación en Educación de Fundación Chile.
Una educación para el siglo XXI busca entregar al futuro ciudadano herramientas para aprender, vivir y trabajar en un tiempo de intensos cambios sociales, económicos y tecnológicos. Cambios que en la voz de los usuarios de educarchile se reflejan en desafíos que deben asumir desde la sala de clases: “una educación integral e inclusiva, pensada para alumnos con distintas capacidades de aprendizajes”, “la abundancia de información requiere tiempo para seleccionar lo más adecuado y veraz”, son algunas de las transformaciones más citadas por el estudio.
Los desafíos educativos
Consultados sobre los principales factores que repercuten en su trabajo educativo, un 55% de los profesores mencionó la diversidad de sus estudiantes. Según Rosario Navarro, directora del portal www.educarchile.cl, esto “tiene que ver con que la reforma educacional efectivamente está pidiendo hacer una enseñanza para todos, lo que significa que el profesor tiene que identificar las diferencias y las similitudes de sus estudiantes y trabajar con ellas”.
Efectivamente, la Ley de Inclusión señala que los colegios deben establecer “programas especiales de apoyo a aquellos estudiantes que presenten bajo rendimiento académico que afecte su proceso de aprendizaje, así como planes de planes de apoyo a la inclusión, con el objeto de fomentar una buena convivencia escolar”.
Por otro lado, el 41% de los profesores también destacó la abundancia de información como una variable que afecta su labor pedagógica. Y es que gracias a las nuevas tecnologías, el conocimiento no es patrimonio exclusivo del profesor, sino que también está en los computadores, tablets y teléfonos que usan sus estudiantes. “El rol tradicional del profesor como alguien que enseña quedó en el pasado. Hoy se espera que sea un facilitador que potencia y avive la luz del aprendizaje de sus estudiantes”, afirma Ana María Raad. Una realidad que puede ser percibida como una amenaza por algunos docentes. “Por eso, creemos que es fundamental acompañar a los docentes y entregarles herramientas para que puedan convertirse en líderes que inspiren a sus estudiantes. Para ello, no pueden trabajar solos como islas, sino de manera cooperativa, compartiendo, aprendiendo de sus pares y con ellos”, complementa.
Consultados sobre los principales factores que repercuten en su trabajo educativo, un 55% de los profesores mencionó la diversidad de sus estudiantes. Según Rosario Navarro, directora del portal www.educarchile.cl, esto “tiene que ver con que la reforma educacional efectivamente está pidiendo hacer una enseñanza para todos, lo que significa que el profesor tiene que identificar las diferencias y las similitudes de sus estudiantes y trabajar con ellas”.
Efectivamente, la Ley de Inclusión señala que los colegios deben establecer “programas especiales de apoyo a aquellos estudiantes que presenten bajo rendimiento académico que afecte su proceso de aprendizaje, así como planes de planes de apoyo a la inclusión, con el objeto de fomentar una buena convivencia escolar”.
Por otro lado, el 41% de los profesores también destacó la abundancia de información como una variable que afecta su labor pedagógica. Y es que gracias a las nuevas tecnologías, el conocimiento no es patrimonio exclusivo del profesor, sino que también está en los computadores, tablets y teléfonos que usan sus estudiantes. “El rol tradicional del profesor como alguien que enseña quedó en el pasado. Hoy se espera que sea un facilitador que potencia y avive la luz del aprendizaje de sus estudiantes”, afirma Ana María Raad. Una realidad que puede ser percibida como una amenaza por algunos docentes. “Por eso, creemos que es fundamental acompañar a los docentes y entregarles herramientas para que puedan convertirse en líderes que inspiren a sus estudiantes. Para ello, no pueden trabajar solos como islas, sino de manera cooperativa, compartiendo, aprendiendo de sus pares y con ellos”, complementa.
Habilidades prioritarias
Pensamiento crítico (39%), responsabilidad personal y social (34%) y creatividad e innovación (29%) son las habilidades más importantes para desarrollar hoy en la educación según los profesores consultados por educarchile. “Desarrollar el pensamiento crítico es hacer de un ser humano uno autónomo, capaz de tomar sus propias decisiones, contrastando y entendiendo lo qué se le está proponiendo y evaluando las posibilidades”, explica Rosario Navarro.
Desde el otro lado, el uso de la información (20%), la colaboración (28%), el estilo de aprendizaje (17%) y la alfabetización digital (10%) son algunas de las habilidades menos relevantes para los profesores.
Vida y Carrera es una de las habilidades que concita menos atención de los docentes, con solo un 6% de las preferencias. Esta habilidad implica la capacidad de establecer un plan de vida y cómo conseguir estas metas. Considera destrezas como la resiliencia, la tolerancia a la frustración; y habilidades como establecer objetivos, reflexionar sobre experiencias pasadas, la elección de una actividad de acuerdo a las propias habilidades, entre otras.
“Que esta habilidad tenga tan poca relevancia es un dolor, porque esta habilidad es la propuesta de vida, es toda la energía que le puede dar el estudiante para que pueda salir adelante, para que considere que su vida tiene el propósito que él quiera. Y eso está en último nivel cuando es, sin duda, algo que falta en toda la Educación”, afirma Rosario Navarro.
Pensamiento crítico (39%), responsabilidad personal y social (34%) y creatividad e innovación (29%) son las habilidades más importantes para desarrollar hoy en la educación según los profesores consultados por educarchile. “Desarrollar el pensamiento crítico es hacer de un ser humano uno autónomo, capaz de tomar sus propias decisiones, contrastando y entendiendo lo qué se le está proponiendo y evaluando las posibilidades”, explica Rosario Navarro.
Desde el otro lado, el uso de la información (20%), la colaboración (28%), el estilo de aprendizaje (17%) y la alfabetización digital (10%) son algunas de las habilidades menos relevantes para los profesores.
Vida y Carrera es una de las habilidades que concita menos atención de los docentes, con solo un 6% de las preferencias. Esta habilidad implica la capacidad de establecer un plan de vida y cómo conseguir estas metas. Considera destrezas como la resiliencia, la tolerancia a la frustración; y habilidades como establecer objetivos, reflexionar sobre experiencias pasadas, la elección de una actividad de acuerdo a las propias habilidades, entre otras.
“Que esta habilidad tenga tan poca relevancia es un dolor, porque esta habilidad es la propuesta de vida, es toda la energía que le puede dar el estudiante para que pueda salir adelante, para que considere que su vida tiene el propósito que él quiera. Y eso está en último nivel cuando es, sin duda, algo que falta en toda la Educación”, afirma Rosario Navarro.
Ficha técnica
La encuesta fue realizada entre diciembre 2015 y enero de este año de manera digital y telefónica. Tuvo cobertura nacional y se encuestó a profesores, psicopedagogos y directores. La muestra total fue de 871 casos, de los cuales 824 son profesores y 47 docentes. La confiabilidad promedio de la encuesta es 3,7%.
La encuesta fue realizada entre diciembre 2015 y enero de este año de manera digital y telefónica. Tuvo cobertura nacional y se encuestó a profesores, psicopedagogos y directores. La muestra total fue de 871 casos, de los cuales 824 son profesores y 47 docentes. La confiabilidad promedio de la encuesta es 3,7%.
Fuente: educarchile.cl