Nunca está de más tener una visión sobre la institución académica actual tratada desde diversos puntos de vista. Libros sobre educación que pueden ayudarnos a entender planteamientos pedagógicos, mejorar en nuestras clases y, en consecuencia, forjar y mejorar nuestra propia perspectiva docente.
Esto es afrontar la enseñanza como algo análogo a la tecnología. Un elemento vivo y cambiante que tiene que ser entendido por medio de múltiples perspectivas y visiones que grandes autores pueden aportarnos.
La ciencia en el aula. Lo que nos dice la ciencia de cómo enseñarla.
El propósito del libro que estamos a punto de compartir es el cómo mejorar la enseñanza de las ciencias en los colegio de educación básica desde la mirada de la propia ciencia. Se trata de establecer el enfoque que la ciencia se aprende, se enseña y se comprende a partir de cómo es producida es decir, para entender y aprender ciencia hay que hacer ciencia.
Las ideas producidas por los científicos son entendida y cobran sentido para ellos porque están inmersos en todo el proceso, por su parte la ciencia en la escuela se aborda desde la idea o producto final olvidándose por completo del proceso.
De ahí deriva nuestra tesis central: la construcción del conocimiento científico en el aula debe reflejar de alguna manera la construcción del conocimiento científico por parte de los investigadores profesionales. La cuestión clave, entonces, es cómo promover en el aula la construcción por parte de los alumnos de los conceptos que deseamos enseñar.
El maestro ignorante.
Un libro sobre educación, filosofía y política que no dejará indiferente a nadie. Con título sorprendente y sagaz, Jacques Rancière, nos acerca a una perspectiva pedagógica, que podemos afirmar, perdura en el tiempo por la innovación que representa su pensamiento. Tanto para educadores como familias de todo el mundo, nos muestra el camino de la libertad y la igualdad que necesitan el alumnado que se encuentra bajo el yugo de la explicación tradicional.
Tener la capacidad de enseñar lo que se desconoce, de emancipar al estudiante de inteligencias que no sean la suya propia, consiguiendo que este puede elegir su propio camino de aprendizaje. En definitiva, explora la idea de un maestro/a que no tiene que ser necesariamente alguien que sabe, sino el que pretende que su alumnado aprenda.
La escuela que quiero.
Una obra que busca ahondar en la importancia de las emociones y del potencial humano para cambiar la educación. Mar Romera nos explica la escuela que quiere, utilizando como hilo conductor de cada aparado la música. En palabras de esta pedagoga, este es un libro para soñar que mañana será un poco mejor y que todos los niños y niñas tienen derecho a una educación integral, plena, respetuosa y llena de experiencias que les permitan dibujar el camino que merece una vida que camina hacia la felicidad.
Los contenidos. Una reflexión necesaria.
Es el más científico en materia educativa, ayudando a comprender aspectos formales sobre la institución escolar, la ley que la rige y la necesidad de ser crítico con nuestro proceder docente.
Es decir, un recurso indispensable para comprender la estructura sobre la que se sustenta la enseñanza y el aprendizaje desde distintos puntos de vista, perspectivas críticas y referencias sobre temas que serán tratados por distintos autores relevantes en materia educativa.
Algunos de los capítulos que podremos encontrar aquí versarán sobre: contenidos, el capital humano, multiculturalidad en la escuela, la exclusión femenina, aprender a pensar para poder elegir, pedagogías innovadoras, impacto de las reformas educativas, los vehículos del saber, redes sociales, etc.
La escuela del mundo.
Autor de la Academia Khan, este profesor, informático, y matemático estadounidense de ascendencia india, plantea una visión radical sobre el rumbo que tendría que acometer la enseñanza para garantizar la calidad, libertad de aprendizaje e igualdad de oportunidades de todos los estudiantes del mundo.
Una visión que parte del método basado en invertir el aula, es decir, grabar lecciones sobre distintas materias para que cada alumno pueda establecer su propio itinerario de aprendizaje, liberando al docente para que pueda llevar a cabo tareas más humanas y cercanas dentro del aula. Se facilita de este modo que individualmente cada estudiante pueda reforzar aquello en lo que falla, aprender lo que aún desconoce o profundizar en contenidos que quiere mejorar sin más dependencia que un dispositivo electrónico y conexión a internet.
Insiste en la necesidad de globalizar un aprendizaje parcelado en áreas, contextualizando lo que se enseña y estableciendo relaciones lógicas entre los contenidos de clase.
Asimismo, una de las máximas de este libro sobre educación será la de establecer las mismas oportunidades para todos y todas sin importar el contexto social en el que hayas nacido y los recursos económicos que dispongas.
Fuente: EduGlobal