“Si me preguntan cuál fue el hecho más importante de mi infancia, debería decir que fue la biblioteca de mi padre. De hecho a veces pienso, que nunca estuve afuera de esa biblioteca”, Jorge Luis Borges.
“Es probable que los días más plenamente vividos de nuestra existencia sean aquellos en que creímos dejar de vivir: los pasados con un libro en las manos”, Marcel Proust.
Resultados preocupantes: No entendemos lo que leemos.
Los resultados de un estudio en el que participó Chile junto a otros 20 países más (la mayoría de ellos más desarrollados) revelaron un resultado preocupante: un alto porcentaje de los chilenos entre 16 y 65 años no ha logrado el nivel de comprensión de lectura necesaria para funcionar en nuestro mundo moderno.
Una verdadera traba en nuestro desarrollo y una pregunta inquietante en relación a la calidad de nuestro sistema educacional. ¿Qué estamos haciendo, si ni siquiera una persona que sale del colegio es capaz de comprender lo que lee?
Loreto Fontaine, especialista en educación e investigadora del CEP, expresa en un artículo reciente, que a veces por aspirar a lo más, dejamos de lado lo mínimo y lo básico. Es un objetivo deseable que los colegios enseñen a leer, escribir y las 4 operaciones matemáticas.
Un niño lector, un colegio lector, un país de lectores.
¿Cuáles son los factores más influyentes a la hora de que un colegio se transforme en un ambiente estimulador de la lectura?
1- Nunca es temprano para encontrarse con los libros: Que los niños se encuentren tempranamente con material impreso. Los niños de prekinder y kinder, si bien no son capaces de leer pueden familiarizarse ampliamente con material escrito. Tener un rincón de lectura en la sala con libros atractivos en imágenes, tener letreros, escribir las noticias de la sala, tener escritos los cumpleaños, escribir narraciones que hagan los niños, escribir diarios de vida en conjunto con la profesora, entre otros.
2- Programa de Lectura Silenciosa Sostenida: Este consiste en un tiempo diario que puede variar de 15 a 30 minutos en donde toda la clase, incluido el profesor lee. La lectura es silenciosa y cada uno lee el material que haya escogido, desde cómics, revistas, libros de cocina, libros de investigación, novelas, etc. De hecho se mencionan dos factores que hacen que los resultados no sean óptimos. Uno que el profesor actúe como supervisor y no esté él también inmerso en un libro.
El rol de modelo es tan poderoso que Kreshan en su libro “El poder de la lectura”, cuenta como un profesor empieza a leer el diario en su rato de LSS, pronto los estudiantes lo imitan, así como también en usar el diccionario o en escoger otros materiales de lectura. El otro factor que altera el programa es el tener poca variedad de material de lectura. Decirle a un niño: “ese libro es muy fácil” o “difícil para tí”, inhibe el impulso lector de los niños, la elección es absolutamente libre (obviamente dentro de los límites de lo que es lectura sana). El programa de LSS le permite a los niños mejorar su capacidad de leer y les permite descubrir la lectura como una alternativa de entretención. Los resultados de los programas de LSS son tan poderosos que según Jim Trelease (un experto en lectura) no sabe ¡cómo todos los colegios no lo aplican!
3- Leerles a los niños en voz alta: un regalo diario: Los niños suecos y fineses presentan el mejor nivel lector a nivel mundial. Sorprendentemente en los colegios suecos y finlandeses leerles a los niños en voz alta es una costumbre diaria, no sólo entre los niños de los primeros cursos, sino que hasta bien entrada la adolescencia.
El poder de la lectura en voz alta reside en el irresistible encanto de “ahora les voy a leer una historia”. Se basa también en que el nivel de comprensión es más elevado para un material que nos es leído, que para uno que debemos leer nosotros mismos. Es decir, un niño de 5° básico es capaz de disfrutar y entender la audición de un libro de un nivel superior al que es capaz de comprender leyendo. De esta manera es posible presentarle a los niños textos que son más difíciles de abordar y así ir enamorándolos de los libros. Una profesora de un 4° básico contaba como les leía a sus alumnos los mitos griegos y siempre interrumpía la lectura en el momento más álgido para luego retomarla al día siguiente. No faltaba el que sin poder aguantar la curiosidad se acercaba a leer el final en el escritorio de la profesora.
¿Qué leerles a los niños en voz alta? Podemos simplemente leerles los cuentos clásicos. También podemos complementar la materia que estemos pasando con una narración, como los “Húsares Trágicos” para complementar el capítulo de la Independencia, o la serie “Un Niño en la Historia” de Ana María Guiraldes y J. Balcells que ilustran diferentes períodos de la historia. O tal vez leerles una noticia del diario o un artículo de una revista. Una encuesta realizada entre 850 profesores (90% de ellas eran mujeres) se les consultó cuales eran sus libros favoritos, y los “TOP TEN” fueron los siguientes:
- Mujercitas, Louise May Alcott
- Heidi, Juana Spiry
- Azabache
- Anne la de tejados verdes (y toda la serie), Lucy Maud Montgomery
- El jardín secreto
- Cenicienta
- Cuentos de Hadas de Andersen
- La Serie de Pipi Mediaslargas
- Winnie Pooh
- Mary Poppins.
4- Una biblioteca viva, acogedora: Una bibliotecaria puede ser un puente maravilloso que una a los niños y los libros. Carmen Lucía Benavides, la bibliotecaria más encantadora e inteligente que he conocido, ve su papel como el de mediadora, quien propicia el encuentro. Para hacerlo debe ser una persona que le gusten mucho los niños y mucho los libros, tiene que conocerlos (a ambos).
Tiene que saber que los cómics como Tin Tin, Mampato, Lucky Luck, Asterix Mickey son para una gran mayoría de niños la puerta de entrada a la lectura. Tiene que permitir que los niños hojeen los libros para poder elegir lo que quieren. Tiene que sugerir al niño indeciso. Tiene que alentar la existencia de material variado. Tiene que hacer marketing de su producto ofreciendo las novedades, haciendo un ranking de los más leídos. Una biblioteca viva es un lugar de cuentos en voz alta, de discusión y crítica literaria, de silencio, de concursos.
He aquí 3 iniciativas que realizó una biblioteca escolar que pasó de 300 prestamos mensuales a 5000:
- Se buscó el apoyo de una fundación para renovar su material de lectura.
- Creó un show de libros, recorriendo las salas para mostrar los libros de la biblioteca y leerles a los niños en voz alta.
- Hizo talleres con los padres para enseñarles y comprometerlos a leerles en voz alta a sus hijos.
Los grandes enemigos de un colegio lector
Como ya podrán anticipar los enemigos más conocidos de la lectura son principalmente: las evaluaciones y los análisis áridos de libros, tener profesores que no leen, bibliotecas poco variadas y acogedoras.
El colegio San Rafael de Lo Barnechea y Nuestra Señora de Loreto, son de los colegios con promedio de lectura anual más altos de nuestro país (aproximadamente 40 libros al año) y no tienen lectura obligatoria y nadie evalúa lo que los niños han leído. Los alumnos van todas las semanas a la biblioteca y se llevan un libro para su casa. Estos tienen bibliotecas escolares riquísimas y muchos profesores grandes lectores.
La lectura obligatoria de un mismo libro para todo el curso, las listas de personajes, las preguntas capciosas de detalles, atenta contra el goce de la lectura y alejan a los niños de los libros, llevándolos a considerar una obligación aquello que muchos consideramos uno de los mayores placeres de la vida: LA LECTURA.
Fuente: grupoeducar