miércoles, 4 de junio de 2014

DIFICULTADES PARA APRENDER, ANTESALA DE UN FRACASO

Si los problemas de lectoescritura y matemáticas no son identificados en forma temprana, irán generando una sumatoria de fracasos en distintas asignaturas, precipitando repeticiones de curso e incrementando en forma irremisible la desmotivación y alejamiento emocional en el alumno.

El modelo de neurociencia cognitiva apunta a los procesos a través de los cuales el proceso madurativo cerebral permite que el niño adquiera competencias académicas nucleares, de modo que el profesor puede identificar en forma temprana las diferencias en ritmos y disfunciones en procesos específicos que presentan algunos alumnos y tomar medidas para abordarlos en forma oportuna.

Aproximadamente un 7-9% de los alumnos en un aula va a presentar problemas específicos del aprendizaje, los que afectarán especialmente la lectoescritura y las matemáticas. Si estos problemas no son identificados en forma temprana, irán generando una sumatoria de fracasos en distintas asignaturas, precipitando repeticiones de curso e incrementando en forma irremisible la desmotivación y alejamiento emocional en el alumno. Algunos provienen de hogares socialmente vulnerables y carentes de estímulos culturales, pero hay otros chicos que escriben desde temprano la “crónica de una muerte anunciada” a pesar de vivir en hogares con recursos tanto materiales como culturales; son niños que parecieran llevar consigo un hemisferio izquierdo que dormita, desconectado e indiferente a los esfuerzos del alumno por responder a los desafíos académicos.

Esos niños muestran ya en 3° Básico diversas manifestaciones de inhabilidad psicolingüística: un chico que lee bien pero con una lentitud exasperante, un niño que lee velozmente pero transformando las palabras hasta que el contenido del texto se hace incoherente, otro niño que año tras año permanece “amarrado a las letras”, descifrándolas para lograr entender la palabra... En cada uno de ellos existen sutiles disfunciones en las áreas de dominio psicolingüístico, la mayoría de ellas resultante de una lenta conectividad sináptica en las regiones corticales izquierdas y/o una lenta mielinización de las vías de conexión; sólo en una minoría de niños se encuentran disfunciones y daños en dichas estructuras por causas genéticas o perinatales.


Todos ellos verán transcurrir la vida escolar unidos por similar drama: ser incapaces de aprender desde el texto y de expresarse a través del discurso escrito; como consecuencia, se equilibrarán constantemente en la cuerda floja de las calificaciones insuficientes, hasta reprobar un año y dar así inicio a un guión que ya no se detendrá: el fracaso escolar crónico… Estos chicos interpelan al sistema escolar desde sus dificultades, clamando sin voz para que el sistema escolar les otorgue un espacio de acogida. La mayoría de estos alumnos es portador de un SDA SUBTIPO INATENTIVO y con Trastorno Específico del Aprendizaje.
 

Los alumnos con SDA SUBTIPO IMPULSIVO no muestran inhabilidades psicolingüísticas ni de pensamiento lógico simbólico, pero por lo general, su desempeño en Matemáticas es mediocre, debido a su estilo cognitivo de tipo impulsivo/inatentivo asociado a insuficientes o inadecuadas estrategias de trabajo (organizar los datos, aplicar correctamente los algoritmos, planificar los tiempos, atender focalmente, mantener información útil en la memoria de trabajo verbal, terminar la tarea sin interrupciones, se deja dominar por la ansiedad y la ofuscación) y en algunos, a la presencia de una ansiedad de desempeño.

Fuente: Calpe & Abyla